domingo, 10 de agosto de 2008

Montanejos: Sendero Presa del Estrecho - Fuente de los Baños - Rio Mijares

FECHA: 11-08-08
LUGAR: Montanejos
SENDERISTAS: Paula, Paula, Lucia, Vera , Raquel , Luis, Eva y Eduardo



Segunda salida de sendas para Paula y Vera, y ésta vez se nos unen a la excursión Paula y Lucia, que se estrenaban en ésta disciplina tan dura y exigente.


Quedamos a las 09:00 horas en la rotonda de la salida 7 (Albalat dels Tarongers) de la carretera de Teruel, para así realizar ésta parte de la ruta en coche juntos. Llegamos a las 09:05 y como todavía no habían llegado los López , bajamos para subirnos a la rotonda:

Enseguida llegaron y fuimos destino a Montanejos, que alcanzamos a la hora prevista: las 10:00 horas. Nada más llegar nos dimos cuenta que el pueblo estaba "abarrotado" de gente, así que dejamos los coches aparcados encima de la acera al lado del Balneario, y cogimos lo necesario para hacer la senda. Bajamos por la rampa que baja hasta el rio Mijares por un lateral del Balneario y seguimos el paseo que lleva hasta la Fuente de los Baños, donde comienza el sendero de la Presa del Estrecho:

El sendero, como se ve en la foto, tiene una distancia de 1,4 km de longitud, más otros tantos de vuelta , hace que el recorrido en total sea de prácticamente 3 km. El sendero comienza con una ascensión a uno de las laderas de la Fuente de los Baños, y enseguida nos adentramos en una zona de pinos:
A los 10 minutos de comenzar la etapa llegamos a un desvio que nos indica dónde está el Abrigo de Rufino. Así que Paula, Paula, Lucia y Vera se agarraron al poste indicativo para indicarnos donde debíamos ir:

Así que nos desviamos a la izquierda a seguir la senda que nos llevó a visitar el Abrigo de Rufino:
Es ésta pequeña cueva que ésta enclavada en un espectacular corte de la montaña.Tuvimos que ir con cuidado pues la altura es espectacular y la protección no lo es tanto: Una vez visitad el Abrigo volvimos a la senda, donde tuvimo que realizar una pequeña parada técnica para probar y degustar las moras de una de tantas plantas que nos cruzamos en la senda. Después reanudamos la senda, y tuvimos que cruzar un peligrosísimo puente de madera, Paula cruzó con su habitual habilidad, y luego lo hicieron Vera: Seguida de Paula: Y finalmente Lucía: Nada más atravesar éste durísimo puente, nos adentramos en el misterioso y peligroso paraje de los anisales, donde miles y miles de éstas plantitas parecían querer cerrarnos el paso, por lo que nos tocó armarnos de valor y luchar contra las circunstancias: Después de atravesar este paraje, entramos de nuevo en una zona de pinada, donde tuvimos que sortear todo tipo de obstáculos: troncos con pinchos caídos en mitad de la senda, atravsar tramposas acequias,....., y así llegamos a la Presa de los Estrechos: En ésta otra fotografía vemos a Eva en la presa, con el estrecho al fondo y su cara muestra su pensamiento.......¿qué no se caera en este mismo momento la presa?...
Una vez visitamos la presa, nos dimos cuenta que la senda continuaba tras unos escalones, así que continuamos por la misma. Aquí vemos a Paula con los estrechos del rio Mijares al fondo: En éste tramo de senda, entre la presa y el estrecho, atravesamos un tunel realizado en una roca. Por si nunca salíamos de él, los aventureros nos hicimos ésta fotografía: Una vez salimos ilesos del tunel llegamos al final de la senda, donde pudimos contemplar con admiración las dos ventanas en el tunel de la carretera que une Montanejos con Puebla de Arenoso. Al lado de la ventana de la izquierda se ven dos cuerdas que los montañeros utilizan para hacer escalada: Así que aprovechamos para almorzar en éste bonito paraje:
Y así, sin darnos cuenta nos comimos los bocatas en un pispas, en un visto y no visto, en.....
Terminamos de almorzar a las 12:00 horas, así que comenzamos el regreso por la senda por la que habíamos venido, volviendo a cruzar el tunel esculpido en la roca, y en ésta ocasión su cruze nos hizo regresar a la epoca de la Edad de Piedra, y nos volvimos todos unos cavernícolas.

Así, sin ninguna parada y directos llegamos a la Fuente de los Baños a las 12:25 horas, con lo que completamos la senda de 2,8 km en total, una senda cortita pero no exenta de parajes digno de ver. Una etapa totalmente recomendable para hacerla en familia. Con la ventaja añadida de poder bañarnos al final de la misma en la zona de Fuente de los Baños.
De ésta forma, Luis y Eduardo se tuvieron que marchar a donde estaban aparcados los coches para recoger todos los trastos que habíamos dejado (la nevera, las longanizas, los chorizos, tortillas, papas, olivas, ropa de recambio, toallas, panes, zapatillas............). En total, casi 1 hora de caminata, la mitad de ese tiempo cargados como mulas, con un sol que daba de lleno, y sorteando a la multitud de personas que se cruzaban en el camino.....pero al final llegamos y nos pudimos dar un refrescante baño.

Las aguas tienen una agradable temperatura constante todo el año, 25 ºC, por lo cual se califican como hipotermales y por su composición química, 700 mg/l sulfatado–magnésicas bicarbonatado mixtas, son consideradas como oligometálicas de mediana mineralización. Aquí vemos otra imagen de la zona de la Fuente de los Baños, donde el rio se cierra entre dos paredes verticales, dandole mayor espectacularidad al paisaje. Dándo la vuelta al recodo, y dentro de un entrante, hay un pequeña cascada de agua fria, justo al lado de un manantial donde brota agua templada.

Después de un buen rato de baño llegó la hora de la comida, con lo que comenzamos a preparar los bocadillos: Pero cuando habíamos encontrado una zona con poco de sombra para poder comer más o menos tranquilos, llegó el guarda y nos dijo que en esa zona no podíamos comer, que era por las avispas, y que teníamos que irnos a la zona una vez pasado el primer puente. Total, que recogimos, de nuevo, y al final nos tumbamos al lado del camino a pleno sol a comer.

Nada más comer, las niñas se dieron un nuevo baño, tirándose una y otra vez del trampolín.
Aquí vemos a Lucía, con su estilo patentado para cuando tienes otitis y no quieres que te entre agua: Paula y Vera:

Y Paula:
Mientras, los papás vigilaban atentos, tanto a sus hijos como a los bebés de los padres de los demás, que los tiraban desde el trampolín, doblándoles el brazo, con grandes posibilidades de que cayera por el lateral......... Luego nos fuimos a un bar que hay arriba de la Fuente de los Baños, y nos tomamos unos refrescos, antes de comenzar a ir hacia donde estaban aparcados los coches, con la idea de ir parando para darnos un baño, y así lo hicimos:
Este tramo del rio Mijares es muy bonito, con la pared vertical al fondo: Después de éste baño, continuamos camino por el paseo que hay entre la Fuente de los Baños y el Balneario de Montanejos: Aunque parezca mentira, toda esa cantidad de bolsas era para pasar el día unicamente, no quiero pensar lo que llevaríamos si nos fueramos para unos días.....
Así que se dieron el último baño en el río, antes de tomar un helado en la plaza del pueblo y visitar el hotel donde estuvimos la vez anterior.


Y así dimos por finalizado un día muy divertido, y agotador. Se durmieron en el coche y no se despertaron hasta el día siguiente.

2 comentarios:

Evasolsol dijo...

Yo me lo pasé realmente bien.y me bañé en el rio 5 o 6 veces.fué genial.Y no me cansé en la senda.IMPRERSIONANTE.kissessssssssssssssss
Paula

Perillan dijo...

He puesto un enlace en mi blog de el vuestro. Es muy gratificante caminar con niños. Me alegra que comartamos afición. Un saludo.
Si quereis pasar por nuestro blog
http://sendeando.blogspot.com/